Expansión esquelética| Caso 49 | Clínica Friedländer

Por: Dr. Itamar M. Friedländer. Ortodoncista.

Este caso que comparto a continuación demuestra lo que podemos conseguir hoy en día con las expansiones esqueléticas en adultos.

Paciente de 26 años remitida por una colega ortodoncista para la solución de su problema de mal-oclusión. En la primera visita vemos que el problema principal de la paciente es una mordida cruzada que viene dada por el problema transversal o de anchura del maxilar superior.

Después de hacer el estudio de ortodoncia y el diagnóstico de todos los problemas que presenta la paciente decidimos que hay que hacer una expansión del hueso maxilar.

El correcto diagnóstico nos revela que el problema de mordida cruzada viene dado por un problema esquelético es decir un problema del hueso superior y no de los dientes. Por esta razón la expansión o el ensanchamiento tiene que ser del hueso y no de los dientes.

Este problema de anchura afecta la mordida y también afecta la estética de la sonrisa. La sonrisa se ve más estrecha con unos espacios laterales negros.

En este artículo ya explicamos cómo usamos el disyuntor en el paciente infantil. En niños el disyuntor se apoya en dientes; y como las suturas entre los huesos están abiertas y los huesos inmaduros la expansión se produce sin dificultades.

Imagen del disyuntor apoyado en dientes de leche

Imágenes de antes y después de la expansión con disyuntor en un niño

En adultos la historia es diferente; las suturas y los huesos están maduros y por está razón, hasta hace poco, los problemas esqueléticos en adultos se trataban con una cirugía maxilo-facial bastante invasiva denominada SARPE que “libera” el maxilar y luego se expandía con un disyuntor.

Actualmente en Clínica Friedländer tratamos, como parte de nuestra filosofía SOC (Surgical Orthodontics Concept), este tipo de problemas con el disyuntor anclado en microtornillos y una cirugía bucal mínimamente invasiva. El anclaje del disyuntor sobre microtornillos permite aplicar las fuerzas de expansión directamente al hueso sin sobrecargar los dientes ya las fuerzas de expansión son grandes y los dientes podrían perjudicarse.

Imagen de uno de los diseños que usamos de disyuntor anclado en 4 microtornillos (flechas verdes)

El procedimiento quirúrgico que acompaña al disyuntor es corto; se tarda unos 30 minutos y el paciente al día siguiente puede volver a su vida normal. Este procedimiento permite expandir con gran eficiencia el maxilar.

Imagen de la expansión a la semana y las dos semanas de activación del aparato

Una vez obtenemos la anchura y el espacio necesario colocamos brackets o tratamos con Invisalign para mover los dientes y empezamos a cerrar el espacio creado por la apertura de los huesos.